La travesía por el desierto: cómo conseguir más lectores para tu blog

Cuando empiezas a escribir un blog, la sensación de estar hablándole a la nada es inevitable. Lanzamos cientos de palabras al ciberespacio y no obtenemos una respuesta inmediata. Es más, muchas veces esa respuesta ni siquiera llega. Es lo que se conoce como la travesía por el desierto, y todo el mundo sin excepción la sufre.

Sería genial arrancarnos a escribir y de inmediato contar con un gran grupo de lectores visibles que se manifiestan y dejan comentarios, más allá de tus amigos. Pero esto rara vez sucede. Obviamente la calidad de tus posts hará que esta travesía por el desierto sea más corta, pero aún así se trata de un proceso por el que todo blogger pasa. Incluso los que cuentan hoy en día con miles de seguidores empezaron como auténticos desconocidos, escuchando el eco de sus propias palabras en la red. Por ello, hoy no me voy a centrar en cosas que ya doy por sentadas como la necesidad de publicar contenido de calidad con regularidad, para lo cual es fundamental contar con un calendario de contenidos. Son obviedades que a estas alturas todos conocemos.

Me gustaría darle un enfoque distinto a este post porque el tema no es nuevo. De hecho, si hacéis una búsqueda rápida en Google, encontraréis infinidad de artículos que hablan sobre ello y todos inciden en lo mismo: calidad del contenido, regularidad en la publicación, compartir en redes sociales… Se trata de cosas que a día de hoy cualquiera sabe o al menos intuye.  Por eso quiero dar un pasito más allá y centrarme en esas otras cosas que se pueden hacer cuando ya has hecho las anteriores:

1. Paciencia.

Relájate y disfruta de los comienzos. Nada llega de la noche a la mañana. Y con el tiempo echarás de menos esta fase en que la presión es menor, no tienes tantos comentarios a los que responder, puedes experimentar para encontrar tu propia voz sin muchos ojos que juzguen tus errores y aciertos e ir perfeccionando tu proyecto poco a poco. Es complicado empezar a sentir el potencial de un blog en menos de un año, así que no desesperes.

2. Revisar el concepto de contenido de calidad para humanizar nuestro blog.  

Antes he comentado que daba por sentado que todo aquel que aspire a incrementar el número de lectores de su blog ya se ha dado cuenta de que es fundamental tener un contenido de calidad, pero… ¿qué entendemos por contenido de calidad? Es importante pararse aquí porque a veces el primer error está en la base, en que entendemos de manera equivocada el concepto de calidad y, en cualquier caso, no acertamos con lo que nuestros lectores ideales querrían leer. Pondré un ejemplo para que lo veáis más claro: imaginad que sois fotógrafos y tenéis un blog. Es muy probable que empleéis este blog para mostrar las sesiones que hacéis y poco más. En ese caso, a menos que seas el amo del universo en cuestión de fotos no lograrás tener un público fiel que espere y lea con ganas la publicación de un nuevo post. Más bien su lectura dependerá de lo que les llame la atención la foto que cuelgues en redes sociales acompañando al enlace del nuevo post.

Fijémonos en «los grandes», en aquellos cuyas fotos nos gustan, nos encantan, pero cuyo blog nos aporta además otras cosas. Por ejemplo, estoy segura de que cuando entráis en el blog de Jackie Rueda no sólo esperáis ver fotos bonitas, sino sonreír con la forma de contar las cosas de Jackie, saber de Marianne y Valeria, que ya son como dos sobrinitas a las que estamos viendo crecer, soñar con viajes fabulosos, etc. ¿Qué es lo que nos atrapa, por tanto? El contenido humano. Llegamos porque nos gustan sus fotos y nos quedamos porque nos gusta ella. ¡Ahí está la clave!

Veamos otro ejemplo, el de Álvaro Sanz. Decidme la verdad, sus fotos os gustan, ¿pero acaso no acudimos una y otra vez a su blog porque nos sentimos inmersos en sus historias? Soñamos con desayunos lentos en mitad de un bosque, con recolectar flores silvestres, cazar amaneceres, viajar en caravana a lugares recónditos y alojarnos en cabañas con un siglo de historia. Nos sentimos vivos, inquietos y cargados de sueños. Y eso es lo que diferencia a un blog que muestra fotos de un blog memorable.

Bajando al planeta tierra, no hace falta viajar a Eslovenia para transportar a vuestros lectores con vosotros. Hay muchos modos de inmiscuirles en vuestra historia, a veces es suficiente con un paseo a esa panadería tan bonita que han abierto en la esquina o compartir de vez en cuando alguna pequeña cosa que hable de quiénes sois, que imprima vuestro sello personal a lo que escribís y, en definitiva, humanice y diversifique un poco el contenido de vuestro blog.

3. Hazte visible.

Para que la gente lea tu blog, antes debe saber que existe. ¿Te has dado a conocer? ¿Cómo lo has hecho? Probablemente me cuentes que compartes tus posts en redes sociales. Puede que incluso cuentes con una página profesional en Facebook. Pero la tarea no termina ahí.  Deberías plantearte otras opciones. Te explico algunas, aunque si te exprimes la cabeza, seguro que encuentras nuevas y originales fórmulas:

-Promociona tu página en Facebook. Por tan sólo 4 euros puedes conseguir promocionar durante un día tu página en Facebook, de cara a conseguir un mayor número de me gustas y que, cuando compartas los enlaces a tus posts, estos tengan más visibilidad. Dado que Facebook te permite segmentar tu audiencia por edad, residencia e intereses, te será sencillo llegar al público que deseas. Pero te recomiendo un pequeño truco: activa la campaña justo unos minutos después de haber compartido algo en tu página que creas que es de 10, un post que de verdad consideres que es la bomba. De este modo, tu campaña será más exitosa.

-Autor invitado de ida y vuelta. Esto es algo que funciona muy bien en ambos sentidos. Se trata de invitar a alguien a que publique un post relacionado en tu blog o proponer escribir tú en el blog de otro. De este modo, se suman los lectores de uno y otro y puedes darte a conocer entre una audiencia nueva. Este tipo de alianzas sólo funcionan verdaderamente si la especialidad de ambos autores es complementaria y casa bien.

-Networking: ¡date a conocer en el mundo real, fuera del mundo offline! Este tipo de eventos siempre están llenos de oportunidades y son enriquecedores tanto a nivel personal como profesional. Cuanto más te relaciones, más conocido será tu blog y multiplicarás las posibilidades de hacerlo crecer. Sin ir más lejos, yo noté un cambio brutal en mi proyecto a raíz de un taller de fotografía. No asistí por motivos ajenos a las fotos, pero charlando relajadamente con otros asistentes surgieron cuestiones relacionadas con la comunicación y el marketing, comenté algo sobre mi blog y tuve un efecto bola de nieve que aún a día de hoy me sorprende.

4. Sé valiente y no te dirijas a todo el mundo. El día en que dejé de intentar abarcar a todo el mundo y decidí escribir directamente para aquellos que me leían, mis posts empezaron a tener más éxito. Y es que ya lo dice el refranero, «quien mucho abarca, poco aprieta». Debes ser consciente de quiénes son tus lectores y pensar en ellos a la hora de escribir. Esto hará que redactes posts con mejor enfoque y te proporcionará una audiencia fiel, que es la que suele recomendar tu blog a nuevos lectores (y no desconocidos que sólo van de paso).

5. Déjate ver en los blogs de otros, coméntales. Pero hazlo desde la humildad y aportando valor desde tu experiencia personal. Ir en modo experto a blogs ajenos, además de ser odioso, tiene pésimos resultados. Es posible que si tu comentario gusta, inspira, interesa o empatiza, otros lectores e incluso la persona que escribe ese blog visiten el tuyo.

6. No sólo promociones en tus redes los nuevos posts, promociona también los antiguos, vuelve a sacarlos a la palestra. Ten en cuenta que las redes sociales están vivas y en continuo movimiento, y que a tus nuevos seguidores les puede interesar algunos de tus artículos anteriores y ser éstos, de hecho, la clave que les haga convertirse en fieles lectores, compartir tu contenido, etc.

7. No te olvides nunca de la existencia del lector oculto. Siempre hay más gente que te lee de la que crees, pero aún no se han manifestado, lo cual no quiere decir que no lo vayan a hacer en un futuro. Podrás comprobarlo no sólo a través de las analíticas, también lanzando alguna promoción que implique una acción por parte de tus lectores. Por ejemplo, tengo una lectora que es siempre la primera en inscribirse a mi newsletter o hacer click en alguna «call to action» cada vez que comparto algo gratuito. Es realmente curioso porque apenas pasan segundos desde que publico hasta que esto sucede, pero jamás de los jamases se ha manifestado por aquí ni en la página de Facebook. Seguro que a vosotros también os sucede. ¡Y no pasa nada! Es otro tipo de lectores, igualmente válidos. Siempre cabe la posibilidad de que con el tiempo se vuelvan más participativos o de que encuentres el modo de empatizar más y mejor con ellos.

Por supuesto, éstas son sólo algunas de las posibilidades que existen. Se trata de estudiar a fondo la temática de tu blog y ser creativo. Algunos sectores cuentan con más posibilidades que otros, pero siempre hay algo que hacer. En mi caso, por ejemplo, colaboro con algunos blogs sobre marketing que se alimentan de lo que otros autores escriben en ellos, pero se trata de plataformas muy concretas de esta especialidad que me consta que funcionan. Puede que en la tuya no existan o que existan pero apenas te aporten visibilidad. Debes estudiar tu caso particular.

Me encantaría que compartieras con nosotros tu experiencia a la hora de atraer lectores a tu blog. ¿Cuáles son tus herramientas fundamentales? ¿Qué cosas son las que te funcionan mejor? Sería genial que nos lo contaras en los comentarios para descubrir nuevas vías entre todos.

¡Hasta la semana que viene!